Los Responsables (vol 1): Sisto Terán Nougués.

Dueño de una envidiable verborragia y nacido en la cuna de una de las más tradicionales familias tucumanas, donde se cuentan colonos, filósofos y políticos de renombre, saltó a la escena local en 1987 cuando se incorporó junto a otros no tan ilustres tucumanos a la versión local de la Unión de Centro Democrático (UCEDE).
Se dice que el inefable Sisto Terán habría finalizado su carrera de abogado en tan solo tres años, obteniendo la medalla de plata por su altísimo promedio.
Candidato a intendente de la Ciudad de San Miguel de Tucumán por el liberal partido de la familia Alzogaray, dio muestras de su vanguardismo al pasarse, tras su fracaso electoral, a las filas del Partido Justicialista en 1991, convirtiéndose en uno de los principales impulsores de la intervención federal al gobierno de José Domato, resultando luego designado Secretario de Turismo y Deportes – ese mismo año – durante la gestión del Gobernador Ramón Bautista Ortega (a) “Palito”.

Hábil operador político, pronto escaló posiciones dentro del deteriorado Partido Justicialista, consagrándose, en 1995, legislador por el Oeste de dicho partido, mediante un aceitado mecanismo clientelar que aun hoy le reditúa sus frutos.
Compartió cartel, en aquella legislatura del gobierno de Bussi, con quien entonces presidía la Comisión de Hacienda y Presupuesto, legislador por la UCR, CPN José Jorge Alperovich, quien luego imitaría los pasos del vanguardista Terán, pasándose también a las filas del justicialismo.
Luego de su paso por la hasta entonces catalogada “Legislatura más cara de la historia”, el ya no tan joven Terán continuó escalando espacios dentro del PJ, hasta convertirse en el candidato a Vicegobernador por aquél partido, acompañando al tristemente célebre Julio Miranda en la fórmula que se consagraría en las elecciones de 1999, en medio de acaloradas protestas de fraude.
Fue durante este período: 1999 a 2003, cuando su nombre y apellido se convirtieron en un anti-símbolo, en razón de la gravísima crisis que vivía la provincia y de las escandalosas denuncias de soborno a los legisladores provinciales para habilitar, via reforma constitucional, la reelección de los mandatos.

Fue también durante ese período que el entonces Fiscal Anticorrupción, Esteban Jerez, logró que el Juez de Instrucción Víctor Perez, requiriera a la Legislatura Provincial el Juicio Político de Sisto.

Sostenía en su pedido que: “las piezas del expediente informan de un elevado índice de acrecentamiento patrimonial, desde 1999 hasta la fecha, del vicegobernador y sus allegados directos”, y que “el crecimiento patrimonial se advierte en la compra de bienes inmuebles y automotores a nombre propio (de Terán) y de algunos familiares directos y amigos personales”.

El magistrado hizo especial referencia a la situación de la empresa G.M.S. Servicios S.R.L, de las que formaban parte “Sylvana Beatriz Dellarossa, Marcelo Daniel Yanotti y Gerardo Pablo Patricio Anadón, esposa, patrocinante y amigo del vicegobernador, respectivamente". También mencionó los bienes y la situación patrimonial de Agro-Avance S.A., de la cual forman parte, “además de Anadón, Luciana Terán Nougués, hermana del vicegobernador, y su esposo, José Eduardo Posse, como presidente”.

Pérez también basó su pedido en la denuncia ratificada ante el fiscal anticorrupción, Esteban Jerez, por la esposa del legislador Mariano Poliche, Amelia Alejandra Ducca, según consta en el expediente. En él se lee que ella habló de que Sisto Terán habría repartido $2 millones en Lecop para los 27 legisladores que votaron por la habilitación de la reforma de la Constitución.
Desde luego, el pedido de juicio político no prosperó, y a pesar de la publicidad del affaire de los sobornos en la legislatura, de haber integrado el peor gobierno en la historia de Tucumán, y de haber sido la cara visible del mismo, ya que – característica que luego perfeccionaría – tomó frente a la prensa cada uno de los golpes arrojados hacia esa administración, el sublema que propiciaba la candidatura de Sisto como legislador resultó en las elecciones de 2003 uno de los más votados, y se aseguró cuatro años más de simpatías con el poder. Lo absurdo: Pasó de posible enjuiciado a enjuiciador, pues preside actualmente la Comisión de Juicio Político de la Legislatura.
Desde su nueva función de legislador, durante el período 2003 a la fecha, Sisto se ha convertido en el escudero del Gobernador Alperovich en la legislatura y ante los medios. Defendiendo sin hesitar proyectos indefendibles, saliendo a la carga de sus propios colegas del colegio de abogados cuando el primer mandatario inició aquella caza de brujas que afortunadamente no logró concretar, o – como lo hizo entonces con Miranda – poniendo la cara para recibir los golpes, gesto muy valorado en el PE actual.
Dotado de una envidiable habilidad para encontrar la mejor sombra, graciás a él muchos supimos que Alperovich iba a vencer a Juri en la interna. No lo supimos porque fuéramos grandes analistas políticos, sino, simplemente, porque vimos de qué lado estaba Sisto Terán Nougués.

Update: Los comentarios de la lectora Juliana nos recordaron - ¡Qué memoria la nuestra! - que en 2002, una Señora de edad - no la conocemos, pero seguramente seríamos grandes amigos - abofeteó al Dr. Sisto Terán en plena vía pública al grito de: "¡Deje de reírse de la gente!". Un episodio que vale la pena traer al recuerdo de todos los lectores, aunque sea para sentirse bien por unos minutos.

Bonus Track: Próximamente y gracias a google earth, las fotitos del humilde rancho de Sisto en la sección Inmobiliaria.

Pedido Especial a los lectores: Si piensan que falta alguna nota esencial para la descripción de la vida política de Sisto, no duden en acercarla.